Que una ventana tenga rotura del puente térmico es imprescindible cuando es de un material que transmite la temperatura con facilidad, algo que sucede con el aluminio.
Es un metal excelente para las ventanas, por su ligereza, su fácil instalación y su precio, pero siempre debe contar con rotura de puente térmico, pues de contrario causará problemas.
¿Cómo saber si una ventana tiene rotura de puente térmico antes de instalarla?
Saber si la ventana tiene puente térmico antes de instalarla es muy sencillo. En ese momento se puede ver el interior del marco a simple vista o quitando algunos de los tapones que trae como embellecedor y con el fin de que el agua no se cuele en el interior.
Si miramos dentro, en las ventanas sin rotura de puente solo apreciaremos el aluminio hueco, mientras que en las que sí lo tienen hay un componente entre medias.
Este compuesto une el marco interior con el exterior y suele ser poliamida de color negro que se aprecia muy bien a simple vista, aunque si nos quedan dudas siempre podemos golpear la poliamida, momento en el que nos daremos cuenta de que suena distinto porque no es metálica.
Trucos para saber si una ventana tiene rotura de puente térmico
Hay varias maneras para saber si estamos ante ventanas con rotura de puente térmico o sin él. Es más fácil saberlo en la tienda, pero no es complicado averiguarlo cuando ya están puestas.
Cuando la vas a comprar
Antes de colocar una ventana, en el momento en el que la estamos adquiriendo, es muy sencillo comprobar si nos vamos a llevar a casa ventanas con rotura de puente térmico o sin él.
Solamente tenemos que preguntar a la persona que no la vende y revisar la documentación o etiqueta que debe acompañar a cada cerramiento en donde siempre lo dice.
En concreto, lo que hay que buscar son las siglas “RPT”, que es como se expresa que las ventanas tienen rotura del puente térmico. De hecho, se siguen vendiendo muchas sin esta tecnología y en sus etiquetas no veremos anunciadas estas siglas.
Cuando ya está instalada
Darnos cuenta de si tenemos instaladas ventanas con rotura de puente térmico cuando no las hemos comprado nosotros y ya están puestas es algo más difícil, pero no imposible.
Uno de los signos de que no lo tienen se da en los días con temperaturas bajas. Cuando la vivienda está caldeada, con la calefacción encendida y en la calle hace mucho frío la ausencia de puente causa que las ventanas “chorreen” agua sin parar.
Esa agua la secamos con una bayeta y a los pocos minutos ya aparece de nuevo llegando a formar pequeños charcos en el suelo o incluso favoreciendo la aparición de hongos en las esquinas de los marcos, otro signo de la ausencia de esta tecnología.
Existe un segundo método que podemos usar y es tocar ambas caras de la ventana, tanto el exterior como el interior. Primero ponemos la mano en una parte del marco y luego en la contraria, de forma que si ambas tienen temperaturas similares no existe rotura de puente térmico.
Este pequeño truco siempre nos va mejor cuando las temperaturas son más extremas, como en el verano y en el invierno, pero funciona en todas las épocas pues lo normal es que la diferencia entre la temperatura de la calle y la de la vivienda sea acusada en todo el año.
Lo mejor es comprar ventanas con rotura de puente térmico, evitando así las condensaciones y que la temperatura exterior se transmita al interior. Si no ha sido posible se puede saber si lo tienen o no con los trucos que hemos dado.
De todas maneras, los técnicos de Ventanas en Granada siempre estamos disponibles para comprobarlo. Se pueden poner en contacto con nosotros a través del teléfono o del formulario web, con el fin de recibir asesoramiento sin compromiso y ayudar así a elegir ventanas de PVC, las cuales no transmiten la temperatura exterior.